Cómo ser casi un buen paciente me mató

Llegué al hospital hace unos cuatro días a las 6 de la mañana con dolor abdominal extremo. Recuerdo que me retorcí en la cama de la sala de emergencias y respiré tan frenéticamente que mis dedos de pies y manos se adormecieron. Recuerdo que le pedí al médico que me ayudara, porque no tuve la compostura para preguntar nada más que eso, y...