La doble atadura psicológica: Cuanto más te quejes de tus problemas, más problemas tendrás
Cuando un insecto se pega en una telaraña, el pánico se apodera de él. Se mueve con todas sus fuerzas para intentar zafarse, pero esos movimientos, que deberían liberarle, en realidad le atan aún más a la telaraña y terminan siendo fatales ya que avisan a la araña de su presencia. Ese patrón también se repite en nuestra vida. A veces nos convertimos...
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